Las pruebas funcionales son un tipo de prueba de software que se centra en verificar que el sistema cumple con los requisitos especificados. Este tipo de pruebas se centra en las funciones del software, asegurando que cada función de la aplicación opere de acuerdo con las especificaciones.

1. Verificar la funcionalidad del software: Asegurarse de que todas las funciones del software operen según lo esperado.
2. Validar los requisitos del sistema: Confirmar que el software cumple con los requisitos especificados por el cliente o el equipo de desarrollo.
3. Identificar defectos: Detectar errores o defectos en el software antes de que llegue al usuario final.

• Basadas en especificaciones: Las pruebas se diseñan a partir de los requisitos y especificaciones del sistema.
• Enfocadas en la entrada y salida: Se centra en las entradas que el usuario proporciona y las salidas que el sistema genera.
• Independientes de la implementación: No se preocupan por cómo se implementa la funcionalidad, sino por el resultado final.

1. Identificación de funciones: Determinar qué funciones del software deben ser probadas.
2. Creación de casos de prueba: Diseñar casos de prueba detallados que cubran todos los aspectos de las funciones identificadas.
3. Ejecución de pruebas: Realizar las pruebas utilizando los casos de prueba diseñados.
4. Comparación de resultados: Comparar los resultados obtenidos con los resultados esperados.
5. Registro de defectos: Documentar cualquier discrepancia o defecto encontrado durante las pruebas.

Supongamos que estamos probando una calculadora simple que realiza operaciones de suma. A continuación se muestra un ejemplo de un caso de prueba funcional:

Ejercicio: Diseña un caso de prueba funcional para una función de restar en una calculadora.

Solución:

• No cubrir todos los escenarios: Asegúrate de que los casos de prueba cubran tanto escenarios positivos como negativos.
• No actualizar los casos de prueba: Mantén los casos de prueba actualizados con los cambios en los requisitos.
• Ignorar la documentación de defectos: Documenta todos los defectos encontrados para facilitar su resolución.

Las pruebas funcionales son esenciales para garantizar que el software cumpla con los requisitos especificados y funcione correctamente desde la perspectiva del usuario. Al diseñar y ejecutar casos de prueba funcionales, los probadores pueden identificar y corregir defectos antes de que el software llegue al usuario final, mejorando así la calidad del producto. En el siguiente tema, exploraremos las pruebas no funcionales, que se centran en aspectos como el rendimiento y la usabilidad del software.